NOSOTROS


Te invento como al viento

y como si fuera cierto

que el cielo se cansara

de verte así tan quieto.



Así te descubro y te veo

en inquietas calesitas

por los veranos en sueños,

con los brazos como alas.



Quisiera verte cerca

y respirar junto el aire,

como la flor y la tierra

y como grillos y noches.



Pero te sé casi lejos

como si fueras mentira,

y mismo así te saludo

jurando al mundo que existes.



Vamos viajando en el tiempo

como si fuéramos libres

como si nada pasara y

y la vejez no existiera.



Es que en verdad la dejamos

como a una estatua en la plaza.

Y nuestro tiempo es eterno.

Y el corazón, nuestra casa…